No se trata de defender la democracia y sus instrumentos a conveniencia. El mayor argumento que se escucha entre quienes quieren mantener esa ley, es el del respeto a las mayorías. Nadie dice otra cosa, nadie quiere asumir que defiende la impunidad.
+ En cuanto a la consulta del voto verde sigo pensando que decidió el miedo, mucho más que las consciencias, no obstante se respetó sagradamente la voluntad de las mayorías durante 20 años.
+ La reforma constitucional del 2009 era técnicamente muy mala cosa. Pero políticamente era correcta. Esa discusión hoy no aporta nada hoy, salvo lo de entender que era una reforma constitucional bastante mala, muy poco elegante.
Nadie salió a defenderla desde el pique, también cómo forma de desmarcarse de su paternidad. Nadie salvo los familiares, se puso las pilas con el tema antes de las últimas dos o tres semanas previas a las elecciones.
No me interesa el análisis de si está bien o mal. Estos son los hechos. Esa es una de las explicaciones de la derrota.
+ Lo que se consultaba en ese referéndum era aprobación explícita de una ley, o conjunto de leyes, de ningún modo se puede inferir que quien no pone la papeleta aprueba la impunidad. Eso es admisible, pero más grave es renunciar a dar la lucha ideológica escudándose en la simplificación de "las mayorías ya decidieron". Eso tiene mucho de operar a conveniencia. Máxime cuando es absolutamente indiscutible que grupos numerosos de frenteamplistas no pusieron la papeleta rosada.
+ Otra clave es la memoria. Es imposible pasar por alto los conceptos que se manejan. No es reciente, es la impronta del MLN en éste segundo gobierno del FA. Es explicito: "acá hubo una guerra entre dos bandos, soy un viejo combatiente y esto lo tengo claro, lo que pasó son cosas de la guerra". Palabras más o menos ha repetido una y otra vez Mujica (nadie lo desmiente, ni Topolanski, ni F.Huidobro, ni Bonomi, ni Rosadilla, nadie el en MLN tampoco). Entiendo que el MLN tenga esa visión y en buena medida la respeto.
Por un lado tenemos a un grupo de intelectuales que se alza en armas contra un sistema muy degradado, corrupto, que multiplicaba la injusticia repartiendo violencia contra toda la sociedad en beneficio de muy poquitos. En el acierto o en el error ellos se la juegan como verdaderos revolucionarios, no dudan en ofrecer nada menos que su vida en ello.
Por otro lado el brazo armado del status quo, del poder establecido, de la oligarquía, el imperio y toda la mano. Entran las fuerzas armadas, "estado de guerra interno" mediante y se desata la guerra. En menos de un año la organización guerrillera no existe más. Cae toda la dirigencia y sus relevos. Todos son salvajemente torturados y condenados a pudrirse en las cárceles. Fin.
Es agosto de 1972.
Lo que vino luego es otro asunto bien diferente y no es exclusivo de nuestra historia. La oligarquía autóctona, el capital financiero y nuestros hermanos del norte estimulan al sector más gorila y fascista del ejército, que luego del golpe de estado, van haciéndose dueño de todo el aparato estatal para ejecutar la operación más siniestra que nos tocó vivir. Conviene repetir, ejecutada desde el estado contra todo el pueblo. No es un grupo que se organiza y la emprende con lo que tiene. Es el estado copado por grupos de poder descaradamente, que emprende una guerra de exterminio contra aquello que define como sus enemigos.
Hay sorprendentes similitudes entre los procesos de las dictaduras en América Latina y lo ocurrido en Europa luego de la gran depresión de 1929 que acabaran en la conformación de los regímenes fascistas de la preguerra. Terrorismo de estado.
Suena a discurso viejo, gastado. Es lo que pasó. Es lo que no se puede dejar pasar cómo "una guerra entre dos bandos de combatientes". No se trata de tupas o anti-tupas. Los guerrilleros no fueron protagonistas de esta parte de nuestra historia. Sí que fueron usados cómo coartada, pero ya no estaban en la calle.
¿A qué cosas echaron mano la dictadura cívico-militar para ejecutar su plan? Abolición de libertades y derechos civiles, proscripción, censura, prohibiciones, tortura sistemática (a miles de ciudadanos uruguayos que nunca empuñaron un arma), saqueo de riquezas, control y clasificación de ciudadanos, violaciones de domicilio, robo de bebés, asesinatos, mentira sistemática, destrucción de la cultura... y el miedo, el dantesco cultivo del miedo como principal herramienta de control ¿todo contra el otro bando? NO, todo contra el pueblo y sus organizaciones sociales y políticas, contra todos nosotros.
Creo que algunos de los conceptos que sostienen dirigentes del MLN no guardan relación con los hechos de nuestra historia y deberían ser más cuidadosos en su tratamiento. Se trata de nuestra memoria colectiva, de nuestra historia, ni más ni menos.
Hablar de "la venganza encubierta de justicia" es cómo mínimo irresponsable, además coincidir curiosamente con el discurso de la derecha. No es anti-tupa hacérselos notar.
Hay mucho más, es mucho más rico y complejo. Estas son sólo cosas básicas de las que todos los Ismaeles son absolutamente inocentes. No lo son los Pepes, Ñatos, Ratones, Lucías, Bichos, los Marenales... No digo que sean culpables, pero es claro que son responsables. Tampoco digo que sean los únicos responsables, pero están muy lejos del ropaje de víctimas que se colocan. Muy lejos.
MZ
MZ